CRISTINA DEL ROSSO TE ENSEÑA A PINTAR
¿Cómo te fue con nuestro ejercicio? ¿Vas bien? (Si te lo perdiste, puedes verlo aquí.)
Hoy nos dedicaremos a pintar las frutas. Como te dije la otra vez, cada una tiene su técnica propia.
Empecemos con el melón. Preparamos un verde con amarillo limón, azul y blanco. Debemos recuperar la forma. Ten cuidado con las proporciones: en la foto, por efecto de la lente de la cámara éstas no son coherentes. Cubre toda la superficie, exceptuando la hendidura central, donde van las semillas. Para esta parte, pintamos con un poco de este verde y blanco, bien claro, viendo muy bien la estructura de cómo se insertan las semillas. Con tierra sombra natural o negro marcamos la cavidad y luego, con blanco y un pincel más delgado, hacemos pinceladas como flecos. A esta parte volveremos más adelante.
Fíjate que en la parte comestible del melón, el color verde no es uniforme: toda la zona alrededor de la cavidad de las semillas es más clara. En el borde externo pintamos con blanco o con tu verde bien claro una línea que marca la porción de la cáscara exterior.
Empecemos con el melón. Preparamos un verde con amarillo limón, azul y blanco. Debemos recuperar la forma. Ten cuidado con las proporciones: en la foto, por efecto de la lente de la cámara éstas no son coherentes. Cubre toda la superficie, exceptuando la hendidura central, donde van las semillas. Para esta parte, pintamos con un poco de este verde y blanco, bien claro, viendo muy bien la estructura de cómo se insertan las semillas. Con tierra sombra natural o negro marcamos la cavidad y luego, con blanco y un pincel más delgado, hacemos pinceladas como flecos. A esta parte volveremos más adelante.
Fíjate que en la parte comestible del melón, el color verde no es uniforme: toda la zona alrededor de la cavidad de las semillas es más clara. En el borde externo pintamos con blanco o con tu verde bien claro una línea que marca la porción de la cáscara exterior.

Toca ahora pintar las nectarinas y los melocotones. Son frutas de la misma familia, pero de diferente variedad. Los melocotones tienen una piel suave, sin brillo y con pelusita. Los trabajaremos con rojo, amarillo, tierra sombra tostada, tierra siena tostada y ocre. Ponemos primero rojo, en la dirección del eje de la fruta. Luego colocamos tierra sombra tostada o tierra siena tostada y estrías en ocre o amarillo. Con mucho cuidado estiramos un poco de pintura sobre el melón, para reproducir la sombra que el melocotón proyecta sobre él; puedes agregar en esta sombra un poco de negro o tierra sombra natural o del verde que tengas en la paleta, como quieras. Podemos marcar las rayas típicas de esta fruta ahora; más tarde tendremos que retocarlas.
Seguimos con las ciruelas. Son muy oscuras, lo más oscuro en valorización de nuestro ejercicio. Para pintarlas, mezcla en la paleta azul, carmín y quizás un poco de negro. Una vez que aplicaste el color en la fruta, estira parte de la pintura sobre la base y entre las frutas, para representar las sombras proyectadas.

Ahora sí tocan las semillas del melón. Usaremos un pincel delgado, con punta, y ocre y tierra siena tostada. Ubícalas donde las veas, con pinceladas cortas y en diferentes direcciones, con ocre. Algunas están escondidas: ésas son más oscuras. Cada una tiene luz y sombra, su propio volumen: para ello le damos algunos toques de tierra siena tostada con el mismo pincel y apenas unos toques de blanco para darles la luz. Podemos retocar con un gris medio la zona de la cavidad central.
Aprovechamos entonces para retocar las ciruelas. Vamos dándole forma con blanco y un poco de la mezcla violeta que tenemos en la paleta. En algunas partes verás que tienen un violeta más cálido, tirando más hacia el carmín; en otras, más hacia el azul. Las sombras las pintamos con negro. Las zonas más luminosas, con blanco y carmín o con blanco y azul.
Volvemos a los melocotones y las nectarinas. Con ocre, amarillo, naranja y rojo vamos reproduciendo las rayas características de estas frutas. Presta atención a las zonas más claras, que se dan en las nectarinas de la derecha.

Finalmente, tenemos que pintar la pelusita de los melocotones. La pintura debe de estar seca. Preparamos un gris medio y lo aplicamos con pincel seco y limpio y vamos difuminando con el dedo.
Pintamos el brillo de las ciruelas donde corresponda, con blanco y un poco del violeta de la paleta en movimientos circulares.
Debemos entonces retocar los pliegues. Falta más brillo del lado de la derecha. Es el momento de revisar nuestro trabajo, dejar de lado la foto o el modelo, y ver si hay algún error o algo que mejorar. En este momento, en mi ejercicio, corresponde aclarar la tela que está sobre la mesa y profundizar la sombra de algunos pliegues.
¿Qué te pareció este ejercicio? ¿Complicado?
Si tienes alguna duda, contacta conmigo y te ayudo.
Nos vemos en la próxima clase de Pintura.
¡No te olvides de limpiar la paleta y tus pinceles!
Hoy aprendiste:
– a pintar melones, nectarinas, melocotones y ciruelas
-y a calibrar zonas de luz y sombra en una naturaleza muerta.