Recurrir a la representación de los dioses en la historia del arte ha sido una constante a lo largo de los siglos. Entidades poderosas, divinas y admiradas por todos, sus apariciones han hecho que toda la leyenda que rodea al mundo de la mitología perviva y nos alcance hasta nuestros días.
De hecho, los nombres de diosas son bastante comunes en nuestra sociedad, habiéndose incluso equiparado a los nombres bíblicos que durante muchísimo tiempo fueron mayoría en cualquier tipo de población.
Por ello, aquí van un pequeño ‘Top 4’ con las diosas más representadas a lo largo de toda la historia del arte.
VENUS/AFRODITA
Sin duda la número 1. Para los romanos Venus, para los griegos Afrodita, pero para todos una cara muy muy sonada por la cantidad de artistas que la han hecho protagonista de sus obras de arte. Diosa del amor y de la belleza, tuvo un papel importante dentro de los textos de la Ilíada, siendo una de las causantes de la tan famosa Guerra de Troya.
Ya en época romana se conocían bastantes esculturas, copias de originales griegos, que representaban a esta diosa que también representa la feminidad y la sensualidad. Sin embargo, su gran triunfo vino en la Edad Moderna, con numerosas representaciones en el Renacimiento y el Barroco, destacando por encima de todas la conocida obra de Botticelli, que narra su nacimiento.
ATENEA/MINERVA
Otra de las diosas de mayor popularidad es la griega Atenea, Minverva para los romanos, que a diferencia de Venus tuvo un mayor auge y una mayor significación para el pueblo griego. Conocida fundamentalmente como la diosa de la guerra, también lo era de la estrategia, y posteriormente de otras disciplinas como la ciencia o la justicia.
Curiosamente, esta diosa tuvo diferentes nomenclaturas en función de sus representaciones, pero la obra que más destacó por encima de todas y que por desgracia hoy ya no existe, es la Atenea Partenos, ejecutada en marfil y oro, y que presidía el mismísimo Partenón de Atenas con sus más de 12 metros de altura.
ARTEMISA/DIANA
Aunque con bastante menos representaciones que las dos diosas anteriormente tratadas, la Diana romana, Artemisa griega, tuvo un gran protagonismo y muchas representaciones en los siglos en que pervivieron estas dos civilizaciones.
Diosa de la caza y la naturaleza, Artemisa era representada habitualmente cazando, con la ayuda de su arco y sus flechas. En el Barroco, al igual que la mitología griega en general, su figura volvió a cobrar gran protagonismo, y es por ello que su imagen más icónica formó parte de una de las arquitecturas más poderosas que se elaboraron en dicho periodo artístico: Versalles.
ISIS
Pero no podemos hacer un ranking de deidades sin mencionar a alguna que otra diosa de una de las culturas más influyentes de la historia de la humanidad: la egipcia. Y entre las que más destaca, sin duda, está la diosa Isis.
La diosa egipcia del amor y de la maternidad, entre otras cosas, fue incluso popular fuera de las fronteras de Egipto, llegando a alcanzar gran fama en el Imperio Romano. Mujer de Osiris y madre de Horus, suele ser representada en el ámbito artístico sentada en un trono y con unas extensas alas. Es sin duda la diosa más representada en el ámbito del arte egipcio.