COMENTARIO HISTÓRICO ARTÍSTICO DE LAS PIRÁMIDES DE GIZEH
ANÁLISIS ICONOGRÁFICO
Las Pirámides de Gizeh es el conjunto monumental más antiguo y el único de las Siete Maravillas del Mundo Antiguo que aún perdura. Las tres pirámides principales corresponden a los faraones Keops, Kefrén y Micerinos.
Las pirámides sirvieron como enterramiento de los faraones, y van ligadas a ellas una larga tradición. Pero no se trata sólo de una tumba real, ya que el significado de la muerte tiene mayor importancia en la tradición egipcia. Para ellos, la muerte era una puerta hacia una nueva vida, y el ritual funerario egipcio encierra gran cantidad de curiosidades y misterios.
El primer misterio de Las Pirámides de Gizeh reside en la propia construcción de las tumbas, debido a la temprana edad en la que se levantan, y teniendo en cuenta además, los precarios medios técnicos con los que contaban.
Era la construcción de la pirámide un elemento que atañía a toda la población, siendo de vital importancia la finalización de la misma antes de la muerte del faraón.
El origen de este tipo de enterramiento se encuentra en la antigua pirámide escalonada de Sakkara, la primera pirámide que se conoce. Fue la tumba del faraón Zoser datada en el 2750 a.C., y su inventor fue Imhotep, Visir del faraón.
Las pirámides dejaron de edificarse durante el Imperio Medio, siendo sustituidas por los Hipogeos, enterramientos subterráneos que ofrecían mayor seguridad a las vastas riquezas con las que se enterraba los faraones.
ANÁLISIS FORMAL
Estas tres pirámides principales fueron realizadas con monumentales bloques de piedra caliza cortados de forma regular en las canteras del sur, y llevados a través del río Nilo hasta el lugar en el que se erigían los edificios.
La pirámide central y de mayor tamaño pertenece al faraón Kefrén, aunque su tamaño varía debido a la elevación del terreno sobre la que fue edificada. Franqueándola se hallan las de los faraones Keops y Micerinos. En su interior se hallaban distintas cámaras funerarias.
La principal era la Cámara del Rey, a la que se accedía a través de enrevesados pasadizos que proporcionaban mayor seguridad a la misma, como la Gran Galería. La cámara era rectangular y de una dimensión reducida, y en ella se colocaba el sarcófago con el cuerpo momificado del faraón.
Próxima a esta se sitúan otras cámaras de dimensiones similares, como la mal denominada Cámara de la Reina, donde residía la estatua llamada “Ka” o doble del faraón, y los tesoros que tendría que llevar consigo a la otra vida. El “Ka” era la fuerza vital que protegía al espíritu del faraón, mantenido según la creencia por medio de los alimentos, por lo que se colocaban junto a él ofrendas de todo tipo.
Asociados a estos monumentos de hallan localizados numerosos enterramientos de menor tamaño, conocidos como Mastabas, en las que se enterraban los miembros de la familia real, y en ciertas ocasiones, eran concedidas a funcionarios y sacerdotes.
Esta necrópolis contenía además grandes calzadas que unían los Templos del Valle con las pirámides, y por las que se discurría el séquito funerario tras el ritual sacerdotal en el templo. Se situaban asimismo los templos de las distintas divinidades egipcias.
Finalmente, uno de los elementos más destacables es la monumental esfinge, que reposa próxima a las tres pirámides como un guardián silencioso que protegía el conjunto ceremonial.
OTROS DATOS DE INTERÉS
La Pirámide de Keops está alineada con otras dos, siguiendo las estrellas que forman el Cinturón de Orión; y el pasaje para descender en la pirámide apunta a la estrella polar conocida como Alpha Draconis.
Dicha construcción ha sido atribuida a extraterrestres, atlantes, egipcios anteriores a Keops o a otras culturas o civilizaciones desconocidas.
Dichas teorías han tenido repercusión en internet, en revistas, libros y en el mundo del cine, con películas como Stargate o 10.000 a.C, donde se atribuye la construcción a extraterrestres o a una civilización desconocida de hace 10.000 años, respectivamente.