Lágrimas

COMENTARIO HISTÓRICO ARTÍSTICO DE LÁGRIMAS

ANÁLISIS FORMAL

Man Ray (1890-1976) fue un artista y fotógrafo norteamericano generalmente relacionado con los movimientos dadaísta y surrealista. Aunque realizó trabajos en diferentes áreas del arte, su fotografía es principalmente conocida surrealista y una de sus principales obras es “Lágrimas”.

En cuanto a los elementos formales de la fotografía podemos notar como el Ray logra usar con gran destreza diferentes elementos compositivos. El sujeto de fotografía es una mujer que se encuentra llorando y la elección del artista es hacer un primerísimo primer plano, lo que desde el inicio nos acerca al personaje fotografiado.

También es importante notar que cada uno de los ojos está cerca a uno de los puntos de interés o tercios, buscando guiar la mirada del espectador hacia ellos.

Con esta misma intención, notamos que el enfoque está principalmente en el ojo del lado izquierdo con una profundidad de campo corta que cubre apenas el otro ojo y las lágrimas, por eso notamos en la parte inferior la nariz y una de las lágrimas desenfocadas.

De hecho, el fotógrafo nos propone un juego muy interesante con las líneas que se crean, primero, en los ojos, que miran hacia el espacio negativo en la frente del sujeto y siguen hacia afuera del encuadre; segundo entre los ojos y las lágrimas, que se relacionan por obvias razones y tercero entre las lágrimas mismas, cuya textura también contrasta con la rugosa del rímel.

ANÁLISIS ICONOGRÁFICO

Man Ray nos presenta un momento congelado; momento que no podríamos pensar de esa forma sino tal vez en un sueño, y por detalles como este se le conoce como surrealista. Las lágrimas estáticas representan una emoción congelada; aún en un momento congelado por una fotografía.

La expresión de la chica nos hace cuestionarnos qué le pasará. Además, la dirección de su mirada, hacia el espacio negativo creado por su frente, nos alimenta más la intriga y nos revela una de las intenciones del fotógrafo: Guiar el recorrido de nuestra mirada.

La composición nos lleva a que miremos los ojos, las lágrimas y luego, siguiendo hacia donde miran los ojos, nos vamos hacia arriba y al no haber nada volvemos a los ojos. Entramos en un bucle.

La foto fue hecha después de un rompimiento amoroso que tuvo Ray con quien fue su asistente y amante así que podríamos interpretar que el artista, al retratar a una mujer llorando, busca ver a su ex amor lamentándose por el rompimiento; de cierta forma esperando que ella también esté sufriendo como él.

Tal vez es el mismo fotógrafo el que está congelado en ese instante; tal vez es él el que está en el bucle.